Hacer frente al estrés es todavía más difícil en las semanas de los exámenes. Todos hemos conocido las noches de estudio, las jornadas maratonianas en la biblioteca, el exceso de café y el miedo a fallar en la prueba. Y aunque resulte obvio por repetido, es necesario tomarse un descanso para combatir ese estrés.
Cada persona tiene su propio pasatiempo o actividad que le proporciona una gran dosis de tranquilidad y felicidad. Y es muy importante sacar tiempo para ello y hacer esas cosas que te sientan bien y que no te han permitido tus ocupaciones. Sigue leyendo